Libertad de expresión y terapéutica: hablan los organizadores

“Precisamente uno de los principales fines perseguidos por nuestra asociación – comenta Francesco Lanza, presidente de la asociación Bona Ona – es la defensa del derecho a la información veraz y a la transparencia informativa que amparan al consumidor y al ciudadano, así como la difusión y divulgación de información de alto rigor científico sobre productos o instalaciones que puedan vulnerar la salud, seguridad, intimidad, medio ambiente y otros derechos humanos fundamentales. Consideramos los consumidores de nuestra comunidad lo suficientemente maduros como para hacerse una propia opinión fundamentada una vez que se le haya permitido acceder a toda la información disponible sin filtros”.

«No acabamos de entender otra vez el revuelo que este evento está causando tanto en el Colegio de Médicos de las Illas Baleares como en la Consellería de Salud – apunta Josep Pàmies, fundador de la asociación La Dulce Revolución – cuando realmente lo que estamos defendiendo son razones científicas de que lo que se está haciendo actualmente es un desastre, no teniendo en cuenta las consecuencias de las prácticas y protocolos aplicados en la pandemia que han traído muertes y efectos secundario patentes y científicamente comprobados de las vacunas como íbamos alertando desde el principio, habiendo remedios eficaces y efectivos sin efectos secundario alguno. Intentamos representar una parte de la sociedad que está harta de esta situación y donde la confianza en las instituciones médicas oficiales ya se ha desplomado«.

“Nos entristece que a estas alturas – comenta el microbiólogo mallorquín Tomeu Payeras, uno de los invitados al acto – se siga reduciendo con la simple etiqueta de ‘negacionista’ a toda iniciativa que demuestre interés por analizar en profundidad cualquier acontecimiento social o por difundir información de gran relevancia que sí ha sido revisada científicamente y que sin embargo no es tenida en cuenta por los organismos oficiales correspondientes. Es hora de dejar de invertir la realidad y de que el acceso a la información que es necesaria para que la gente pueda ejercer sus derechos y libertades no siga siendo usurpado.”

Guillem Ferrer, fundador de la asociación Poc a Poc, invita a un entendimiento entre las partes: «Este encuentro del día 26 con los amigos de Pàmies es un gesto de paz de libertad y de unidad. Debemos aprovechar esta oportunidad para unir y compartir las ideas y opiniones de unos y otros. Las declaraciones de los últimos días en los medios de comunicación respecto al encuentro y sus participantes son un sin sentido y lo único que hacen es separar, dividir, generan violencia y crean sufrimiento especialmente para ellos mismos. No necesitan castigo. Necesitan ayuda. Ese es el mensaje que están mandando. Dejar ir nos da libertad y la libertad es la única condición para la felicidad. Estamos vivos, todo es posible«. Que así sea.